LA FAMILIA, UN EQUIPO QUE TIENE ROLES QUE CUMPLIR

La familia es una institución, un equipo constituido por personas entrelazadas biológica, emocional, espiritual y socialmente en un Sistema, compartiendo no solo un espacio común, sino una serie de actividades definidas a través de los roles que influyen positiva o negativamente en el desarrollo de la personalidad de cada uno de sus miembros. Los roles familiares generalmente se dan en pares. Existiendo el papel de esposa se da el papel de marido; el de padre y el de hijo (a); el de madre y el de hija (o), etc. Además, ocurre que una persona ocupa muchos papeles diferentes, ya que las exigencias de los distintos papeles pueden no siempre concordar perfectamente. Por ejemplo: Ser padre o madre requiere de cuidar y educar a los hijos y ser esposo o esposa requiere a su vez de una atención y dedicación a la pareja. Ambos roles son asumidos por el ser humano en su cotidianidad; situación que muchas veces genera en ellos conflictos en el desempeño de sus papeles, llamado “Tensión del rol”, el que ocurre cuando un individuo encuentra difícil cumplir las exigencias de algún rol que esté realizando. Actualmente, observamos que los roles tanto para la madre como para el padre han ido cambiando. Antiguamente, existía la familia patriarcal en la cual la autoridad recaía sobre el padre quién tenía derechos casi absolutos no solo sobre la mujer sino también sobre los hijos, la herencia y la descendencia. Pero, ahora la vida laboral, el avance tecnológico e industrial han generado cambios en los papeles. Las tareas domésticas se redistribuyen, los esposos y los hijos participan en oficios que tradicionalmente no ejercían, así como también muchas tareas se dejan de realizar. Por tal razón, la mujer, los hijos, la sociedad y el mismo hombre requieren una imagen nueva del varón, un padre renovado, paralelo a los cambios a favor de una nueva mujer-madre que también socialice y comparta su poder en lo doméstico. Donde cada uno, tenga su espacio dentro de la formación de los hijos, la organización del hogar, la pareja y el desarrollo personal. Para concluir, es necesario destacar que el rol del padre y la madre, resulta ser más significativo en las edades pre-escolares, pues es en esta etapa donde se forman elementos estructurales de la personalidad del niño, se fortalecen vínculos afectivos y se desarrolla la confianza de éste con sus progenitores, lo cual le permite relacionarse y desenvolverse con el mundo que lo rodea. Bibliografía: - Tesis: “El Rol del Padre y Madre en las Familias en las que ambos trabajan”. Maria- Amaris Macias. Université du Nord, Barranquilla- Colombia. - Revista: CORRIENTE DE OPINIÓN. Abril 2002- Vol Nº 64. Artículo: “El Rol del Padre y su Influencia en los Hijos. Fundación Chile Unido.